Pluma...

Yo se que muchos temen, temen a dejar por un momento lo que son, y mirarse desde afuera y ver en lo que se estan transformando, y mas que eso, temen en juzgar sus propios actos, en aconsejarse a si mismos desde afuera, se inquietan al pensar en que pueden descubrir y simplemente son... para no huir... solo que disimulan muy bien el escape de tal enfrentamiento, y limitan su actuar junto al deber, a lo moral, a lo que se quieran aferrar, latiendo sigue el impulso vivo y la anarquia los invita a ser infiel del prolijo deber de hacer bien para ti y para ellos, pues bien, queda en acento la calidad de decisión, de pertenencia a la vida que se vive y que no necesariamente se proyecta, queda la calida o fria mañana que comienza para intentar avanzar el dia uniendo tu produccion de pensamientos que te dejan volar tan alto y caer como una pluma desde el cielo, haci, se mantiene la sensación, tan cercana que se vuelve lejana, el miedo a enfrentar la caida, simple y sensilla de la llegada al suelo es un punto a parte, la dificultad esta en mirar toda la caida que lentamente y de manera desprolija realiza la pluma desde lo alto para llegar finalmente a algun destino incierto, y esque no se pueden crear blancos, por que su peso es demasiado liviano para dirijirlo...y es hay, donde se cree en realmente firmar un deseo, y darle la forma a lo que se quiere, identificarlo y no perderlo... hay, cuando el impulso esta, ir, dejarse llevar... y conseguir lo que se buscaba... trabajar para descubrir que es realmente lo que se quiere es otra disyuntiva, el cambio es permanente, los caminos diferentes, la incertidumbre promueve el movimiento, y con ello la novedad de algo que se aproxima con los pasos que se dan, y no se sabe que es, si causa mal o bien, solo distrae cuando el hoy deberia mantener la atencion en el hoy, que generara un instante mas de lo que podria ser el futuro, pero con cada instante utilizado de manera favorable, incluyendo caidas, todo es parte de lo manejable y lo improvisado de la vida...